No tiene nada que ver con la calidad del servicio o producto, ni con trabajar más horas, ni con tener una web superatractiva o una legión de seguidores en RRSS, ni tampoco con el presupuesto en publicidad o en SEO.
La diferencia reside en algo mucho más sencillo en lo que, casi seguro, no te has parado a pensar todavía.
Internet es como una tienda de chinos.
Está lleno de cosas, muchas no sabes ni que existen y cuando vas a buscar algo concreto hay tal variedad y tan parecido todo que no sabes qué elegir.
¿Entonces cómo destacar y llamar la atención de tus potenciales clientes?
La clave para convencer y vender es y seguirá siendo la persuasión.
(Ahora lo llaman copywriting, pero esta disciplina, la escritura persuasiva, tiene más de 100 años)
Hay muy pocos negocios que son persuasivos en Internet. Muy pocos.
Pero el que lo es…, da igual que no sea el mejor, es el que más vende y el que menos gasta en publicidad.
Si quieres solucionarlo
Tengo algunos servicios que pueden interesarte: